Abstracto
Este artículo examina las limitaciones y consecuencias de los sistemas tradicionales de evaluación y calificación en la educación, y explora los beneficios de enfoques alternativos que reconocen el progreso individual y el desarrollo de habilidades. Al analizar la pedagogía Montessori y las plataformas de aprendizaje gamificada como Duolingo, este artículo demuestra que los enfoques alternativos pueden fomentar la motivación intrínseca, la mentalidad de crecimiento y el aprendizaje profundo, lo que conduce a mejores resultados académicos y un mayor bienestar general. Los hallazgos de este artículo tienen implicaciones para educadores, formuladores de políticas e investigadores, destacando la necesidad de un cambio de paradigma en la evaluación del aprendizaje que priorice enfoques de educación holísticos y centrados en el estudiante.
Pablo Velarde
Neuroscience in Educational Sciences
University of Helsinki
16 de agosto de 2024
Introducción
El sistema tradicional de pruebas y calificaciones ha sido la piedra angular de los sistemas educativos durante siglos, utilizando pruebas y calificaciones para medir el progreso y determinar el éxito académico. Sin embargo, un creciente conjunto de investigaciones sugiere que este enfoque puede tener consecuencias no deseadas, como aumentar la ansiedad y el estrés, fomentar una mentalidad de desempeño, obstaculizar la motivación intrínseca y limitar el desarrollo de una mentalidad de crecimiento en los estudiantes.
Este artículo explora la evidencia de que un enfoque alternativo, centrado en reconocer el progreso individual y el desarrollo de habilidades, puede ser más beneficioso para el aprendizaje que el sistema tradicional de pruebas y calificaciones. Al examinar las limitaciones y consecuencias de las pruebas y calificaciones tradicionales y explorar los beneficios de enfoques alternativos como la pedagogía Montessori y las plataformas de aprendizaje gamificadas como Duolingo, este artículo pretende contribuir al desarrollo de una comprensión más integral y matizada de la evaluación y el aprendizaje.
Tanto el Enfoque Montessori y plataformas gamificadas, mientras Duolingo comparte los elementos para lograr una experiencia fluida.: metas claras, posibilidad de concentración enfocada, tareas y desafíos que son alcanzables (equilibrio entre desafío y habilidad personal), control sobre las propias acciones, retroalimentación inmediata, participación sin esfuerzo que remueve de nuestra conciencia las preocupaciones y frustraciones de la vida cotidiana, desaparición de la preocupación por uno mismo (mientras, paradójicamente, el sentido del yo emerge más fuerte una vez terminada la experiencia de flujo), y sentido alterado de la duración del tiempo (Csikszentmihalyi, 2009; Holopainen y Stain, 2015).
El sistema tradicional de pruebas y calificaciones: limitaciones y consecuencias
El sistema tradicional de pruebas y calificaciones, a pesar de su implementación generalizada, ha sido criticado por sus posibles efectos negativos en el aprendizaje. Las investigaciones sugieren que este enfoque puede:
1. Generar Ansiedad y Estrés:
La presión para obtener buenas calificaciones puede ser una fuente importante de ansiedad (emoción que se caracteriza por sentimientos de tensión, pensamientos de preocupación y cambios físicos como el aumento de la presión arterial) y estrés (estado de preocupación o tensión mental generado por una situación difícil) para los estudiantes.
Las encuestas PISA de la OCDE (2015, 2022) muestran tasas alarmantes de estudiantes que experimentan preocupación y ansiedad relacionadas con las calificaciones y los exámenes. En 2015, el 65,7% de los estudiantes informaron sentirse preocupados por las malas calificaciones y el 59,3% informaron que a menudo les preocupa que tomar un examen sea difícil y el 55,5% de los estudiantes se sienten muy ansiosos por los exámenes escolares, incluso cuando están bien preparados. (Resultados PISA 2015, 2017), y en 2022 El 56,1% de los estudiantes se siente nervioso o muy nervioso ante la llegada de los exámenes. (OCDE, 2023). Este estrés académico puede contribuir a sentimientos más amplios de ansiedad e impactar negativamente el bienestar general de los estudiantes. (Pascoe et al., 2020), como lo demuestra una encuesta nacional de estudiantes de secundaria de EE. UU., donde 79,8% reportaron sentirse estresados (Belli, 2020). Parte de este problema podría deberse a la común Sistema de calificación con marco de pérdida (los estudiantes comienzan con la cantidad máxima de puntos y solo pueden perder puntos por respuestas incorrectas) que reduce la capacidad del estudiante para desempeñarse bien en los exámenes y en los cursos en general. (Bies-Hernandez, 2012).
Una reforma importante en Suecia que introdujo calificaciones y aumentó las pruebas estuvo incluso relacionada con un mayor estrés relacionado con la escuela, una menor autoestima académica, una menor satisfacción con la vida y un aumento de los síntomas psicosomáticos. (Högberg et al., 2021). Pekrun et al. (2023) ilustran aún más la relación cíclica entre las emociones negativas y las malas calificaciones, destacando el impacto perjudicial de la ansiedad ante los exámenes en el rendimiento académico y la salud mental de los estudiantes; “Por ejemplo, la ansiedad antes de un examen puede incluir nerviosismo, sentimientos de inquietud (afectivos), preocupaciones por un posible fracaso (cognitivo), excitación fisiológica (fisiológica), impulsos para evitar realizar el examen (motivación) y expresiones faciales ansiosas (comportamiento expresivo). » (Pekrun et al., 2023), lo que podría provocar un mal rendimiento en un examen académico (Stöber y Pekrun, 2004).
Desde una perspectiva neurológica y fisiológica. La ansiedad y el estrés asociados con las pruebas tradicionales pueden desencadenar una cascada de respuestas perjudiciales para el aprendizaje. La activación del eje hipotalámico-pituitario-suprarrenal (HPA) y la liberación de cortisol, la principal hormona del estrés del cuerpo. (Hinds y Sánchez, 2022). Los niveles elevados de cortisol pueden perjudicar la recuperación de la memoria y dificultar la actualización flexible de los recuerdos, lo que dificulta que los estudiantes adapten sus conocimientos ante nueva información. (Hinds y Sánchez, 2022) y suprimir temporalmente la respuesta del sistema inmunológico, lo que afecta a los estudiantes a una mayor tasa de enfermedades en la temporada de exámenes (McGregor et al., 2016; Oeste & Kelley, 1984; Whiting et al., 2021). Además, la ansiedad ante los exámenes puede activar la amígdala, una región del cerebro involucrada en la detección de amenazas, lo que lleva a una mayor sensación de miedo y ansiedad. (Phan et al., 2002). Estas respuestas neurológicas y fisiológicas pueden manifestarse en síntomas físicos como aumento de la frecuencia cardíaca, sudor y temperatura corporal. (Ekman et al., 1983), lo que contribuye aún más al impacto negativo de la ansiedad ante los exámenes en el rendimiento cognitivo y el bienestar general de los estudiantes. El estrés crónico puede incluso tener consecuencias a largo plazo para la memoria, el aprendizaje, la salud mental y un mayor riesgo de desarrollar trastornos de ansiedad. (Abraham, 2020; Hinds y Sánchez, 2022; Vogel y Schwabe, 2016).
Una manifestación específica de la ansiedad ante los exámenes es la ansiedad matemática, caracterizada por tensión y aprensión que interfieren con la manipulación numérica y la resolución de problemas. A menudo se ve exacerbado por la presión del tiempo y puede conducir a actitudes negativas hacia las matemáticas, conductas de evitación y un menor rendimiento en pruebas estandarizadas. (Boaler, 2014; Richardson y Suinn, 1972; Wigfield y Meece, 1988). Los estudios de neuroimagen han revelado que la ansiedad matemática se asocia con hiperactividad en la amígdala, mayor actividad en la ínsula (al anticipar tareas matemáticas) y reducción de la actividad en la corteza prefrontal dorsolateral (DLPFC), una región crucial para el control cognitivo y la regulación emocional (Suárez-Pellicioni et al., 2016). Estos patrones neuronales pueden crear un círculo vicioso en el que la ansiedad perjudica la función cognitiva, lo que lleva a un rendimiento deficiente, lo que a su vez refuerza la ansiedad.
Los efectos debilitantes de la ansiedad ante los exámenes, tanto en general como específicamente en el contexto de la ansiedad matemática, subrayan la necesidad de prácticas educativas que prioricen un entorno de aprendizaje positivo y de apoyo. Al minimizar el enfoque en las pruebas de alto riesgo y fomentar la motivación intrínseca, los educadores pueden ayudar a los estudiantes a desarrollar una relación más saludable con el aprendizaje y alcanzar su máximo potencial.
2. Fomentar una mentalidad de desempeño y reducir la motivación intrínseca:
Los esquemas de calificación son ubicuos, el énfasis que los padres, los docentes y los gobiernos ponen en las calificaciones a menudo cataliza los “objetivos de desempeño”, o el deseo de superar a los demás, ya que las calificaciones suelen ser comparativas y no basadas en criterios. Sin embargo, a pesar del uso generalizado de calificaciones, hay muy poca evidencia de que los esquemas de calificación mejoren la motivación o el aprendizaje, mientras que hay evidencia de efectos negativos. (Pulfrey et al., 2011; Ryan y Deci, 2020).
Este enfoque en la validación externa puede socavar la motivación intrínseca y obstaculizar un aprendizaje conceptual más profundo. (Benware y Deci, 1984; Grolnick y Ryan, 1987). Un estudio longitudinal realizado en Suecia reveló que las calificaciones en la escuela primaria tenían una asociación negativa con el rendimiento en grados posteriores y disminuían la probabilidad de completar la educación secundaria. (Klapp, 2015). Además, las investigaciones han demostrado que el impacto negativo de las calificaciones en el rendimiento posterior de los estudiantes con bajas capacidades está mediado en gran medida por su autoconcepto académico y su motivación para mejorar. (Klapp, 2018).
Además, se ha demostrado que la expectativa de recibir una calificación disminuye la motivación intrínseca de los estudiantes, cambiando su enfoque del placer de aprender a la búsqueda de la validación externa. (Pulfrey et al., 2011). Esto puede conducir a una experiencia de aprendizaje menos satisfactoria y menos atractiva, lo que en última instancia dificulta el éxito académico a largo plazo.
3. Limitar el desarrollo de una mentalidad de crecimiento:
Además de socavar la motivación intrínseca, una motivación para aprender impulsada por recompensas o presiones externas, como el miedo al fracaso, puede llevar a los estudiantes a evitar desafíos y adoptar estrategias de aprendizaje superficiales como la memorización. (Janeiro et al., 2017). Este enfoque puede resultar en una falta de comprensión más profunda y una dependencia de técnicas de memorización a corto plazo.
Se ha demostrado que estudiar intensamente, aunque puede generar beneficios de aprendizaje a corto plazo, tiene beneficios limitados a largo plazo, ya que el conocimiento adquirido flota y se desvanece tan pronto como se adquirió. (Qadir e Imran, 2018). kornell (2009) Un experimento con tarjetas didácticas ha demostrado que, a pesar de parecer una técnica eficaz, sus beneficios sobre la memoria son menores que los del aprendizaje espaciado.
Además, este enfoque en las calificaciones y las ganancias a corto plazo puede tener un impacto más profundo en la mentalidad de los estudiantes, fomentando una «mentalidad fija», donde los estudiantes creen que sus habilidades son innatas e inmutables. (Dweck, 2006). Esto puede llevar a evitar desafíos, miedo al fracaso y baja autoestima, al tiempo que obstaculiza el desarrollo de una mentalidad de crecimiento, donde los estudiantes creen que sus habilidades pueden desarrollarse a través del esfuerzo y la dedicación, esenciales para el éxito académico y el crecimiento personal a largo plazo. .
Las investigaciones han demostrado que una mentalidad fija puede conducir a peores resultados en los exámenes, especialmente cuando los padres consideran que el fracaso es debilitante y se centran en el desempeño de sus hijos en lugar de en su aprendizaje. (Haimovitz y Dweck, 2016; McCutchen et al., 2016).
Algunas ventajas reconocidas de las pruebas
De hecho, la aplicación de pruebas puede servir como una herramienta valiosa en el proceso de aprendizaje, particularmente cuando se usa estratégicamente para identificar áreas de debilidad y promover una comprensión más profunda. (Brown et al., 2014). Se ha demostrado que la práctica de recuperación, que implica recuperar activamente información de la memoria (como tarjetas didácticas o exámenes orales), es una estrategia de aprendizaje muy eficaz. (Qadir e Imran, 2018). Este proceso de recuperación fortalece las vías neuronales asociadas con el material aprendido, haciéndolo más accesible para recordarlo en el futuro. Además, el esfuerzo cognitivo que implica recuperar información puede estimular la plasticidad sináptica, conduciendo a la formación de nuevas conexiones y a la consolidación de recuerdos a largo plazo. (Owens y Tanner, 2017).
Las investigaciones también sugieren que recibir una calificación baja a mitad de semestre puede motivar a los estudiantes a mejorar su desempeño posterior, al indicarles que necesitan dedicar más tiempo y esfuerzo al curso. Los estudiantes generalmente mejoran su desempeño concentrándose en tareas de bajo riesgo, como participación en clase, pruebas de lectura y ejercicios en clase, en lugar de concentrarse únicamente en el examen final. (Gris y colorido, 2022).
Si bien las calificaciones y las pruebas estandarizadas se han utilizado tradicionalmente como predictores del éxito académico y profesional, es importante reconocer que estas medidas pueden no capturar completamente la compleja interacción de factores que contribuyen al logro. La correlación entre las calificaciones y el éxito futuro podría verse influenciada por factores como las expectativas de los profesores y los padres, la motivación de los estudiantes y las limitaciones de las pruebas estandarizadas para evaluar habilidades relevantes para el éxito profesional, como la creatividad, la perseverancia y la inteligencia social. (Brookhart et al., 2016; Hattie, 2023; Lerdau et al., 2007). Además, las pruebas estandarizadas han sido criticadas por sus sesgos inherentes. (Barr, 1964) y su potencial para afectar a los estudiantes de minorías, lo que incluso conduciría a tasas de graduación reducidas en algunos casos. (Betts y Grogger, 2000). Y la aparición de una IA capaz de superar incluso las pruebas estandarizadas más exigentes, como el Examen de Licencia Médica de los Estados Unidos (USMLE). (Brin et al., 2023; Kung et al., 2023; Mbakwe et al., 2023; Yaneva et al., 2024) desafía aún más su validez y confiabilidad como medidas únicas de conocimientos y habilidades.
Por lo tanto, si bien las pruebas pueden ser una herramienta útil en algunos casos para el aprendizaje y la evaluación, el sistema tradicional de pruebas y calificaciones, si bien está profundamente arraigado en las prácticas educativas, presenta limitaciones importantes. Puede promover una mentalidad orientada al desempeño, exacerbar la ansiedad y el estrés, obstaculizar el desarrollo de una mentalidad de crecimiento y erosionar la motivación intrínseca, además de desviar el foco de la oportunidad de reforzamiento que brinda un examen que permite observar las fortalezas y oportunidades. Para mitigar estas consecuencias negativas, es esencial adoptar un enfoque más matizado que incorpore las pruebas de manera reflexiva y equilibrada, junto con otros enfoques que fomenten la motivación intrínseca, una mentalidad de crecimiento y un desarrollo integral de las habilidades y capacidades de los estudiantes.
Un enfoque alternativo: fomentar la motivación y el crecimiento intrínsecos
Por el contrario, fomentar una experiencia de flujo en la educación, ejemplificada por la pedagogía Montessori y Duolingo, se centra en el reconocimiento del progreso individual y el desarrollo de habilidades.
El impacto positivo de la pedagogía Montessori en el aprendizaje y desarrollo de los niños es multifacético. Se alinea con María Montessori. (1994) visión de fomentar la motivación intrínseca y el aprendizaje autodirigido, en lugar de someter a los estudiantes a las presiones de la evaluación y comparación externas. El enfoque permite que cada alumno avance a su propio ritmo y se exprese libremente, cometiendo errores y aprendiendo de ellos bajo la guía de un profesor y un plan de aprendizaje personalizado. (Saha & Adhikari, 2023; Turós, 2024). Y fomenta la motivación intrínseca, que se asocia con una mayor sensación de interés, entusiasmo y confianza que se traduce en un mejor desempeño, perseverancia y creatividad. (Ryan y Deci, 2020). La falta de énfasis en los exámenes y las calificaciones crea un entorno de aprendizaje menos estresante, lo que se alinea con los hallazgos neurocientíficos de que el estrés crónico puede afectar negativamente la memoria y el aprendizaje. (Hinds y Sánchez, 2022).
En contraste con el enfoque de la educación tradicional en pruebas estandarizadas y medición del desempeño, el método Montessori se alinea con el concepto de metas de logro o dominio. Estos objetivos enfatizan el crecimiento personal y el desarrollo de habilidades, fomentando un sentido de competencia y satisfacción intrínseca que puede conducir a un aprendizaje más profundo y un mayor compromiso. (Jordan y Kaplan, 2020). La ausencia de sistemas de calificación basados en las pérdidas (por ejemplo, escribir el número de puntos perdidos/perdidos en exámenes o tareas), tal como lo defiende (Bies-Hernandez, 2012), contribuye además a un entorno de aprendizaje positivo que anima a los estudiantes a centrarse en el progreso y el dominio en lugar del miedo al fracaso; de manera similar, el uso de técnicas de reevaluación puede conducir a un desempeño superior de los estudiantes, por ejemplo, cuando una prueba de matemáticas se reformuló como un desafío. (Brooks, 2014; Whiting et al., 2021).
La importancia de la autonomía y la motivación intrínseca se ve respaldada además por Sheldon y Krieger (2007), quienes encontraron que en la facultad de derecho los estudiantes tenían una disminución en el bienestar, los valores y la motivación, pero los estudiantes de derecho que percibían un mayor apoyo a la autonomía por parte del profesorado experimentaban una menor disminución en el bienestar y la motivación y, en última instancia, lograban mejores resultados académicos, incluso mayores. promedios de calificaciones y mejores resultados en los exámenes de la abogacía, y una mayor motivación autodeterminada para el primer trabajo después de graduarse.
Las investigaciones han demostrado consistentemente que los estudiantes Montessori tienden a superar a sus compañeros con educación tradicional en las pruebas estandarizadas y en el rendimiento académico general. (Dohrmann et al., 2007; Lillard, 2008, 2021). Los beneficios se extienden más allá de lo académico: los estudiantes de Montessori demuestran habilidades sociales y emocionales mejoradas, incluyendo empatía, cooperación, resolución de conflictos y autoestima. (Lillard, 2008, 2021). Randolph et al.. (2023) solidifican aún más estos hallazgos, mostrando el impacto positivo de la educación Montessori en los resultados tanto académicos (capacidad académica general, matemáticas, lenguaje, estudios sociales) como no académicos (función ejecutiva, creatividad).
El éxito del método Montessori se puede atribuir en parte a su alineación con los procesos naturales de aprendizaje del cerebro. El énfasis en el aprendizaje y la exploración autodirigidos aprovecha el sistema de recompensa del cerebro, desencadenando la liberación de dopamina en el cuerpo estriado y reforzando las vías neuronales asociadas con el aprendizaje exitoso. (Gaujard y Denervaud, 2023). El uso de materiales sensoriales prácticos promueve la cognición incorporada, facilitando la integración de la información y una comprensión más profunda. (Eret & Jagnjić, 2020; Policía, 2023). Las aulas de edades mixtas y el entorno de aprendizaje colaborativo fomentan la interacción social y la regulación emocional, cruciales para desarrollar la empatía y las habilidades sociales. Estas experiencias pueden dar forma a regiones del cerebro asociadas con la cognición social y el procesamiento emocional. (Gaujard y Denervaud, 2023). Lo que se encuentra en línea con los hallazgos de Flores et al. (2024) en su reciente investigación longitudinal que demuestra las ventajas a nivel de aprendizaje en comprensión lectora de las tutorías entre pares.
Además, la reducción o eliminación de notas en la educación Montessori evita la activación de respuestas dañinas asociadas al estrés y la ansiedad. Normann et al. (2023) analizó 23 publicaciones únicas revisadas por pares relacionadas con el uso de calificaciones en evaluaciones educativas. Descubrieron que reducir el uso de calificaciones puede mejorar la motivación intrínseca al facilitar la reflexión, la retroalimentación y la autorregulación, además de aumentar el bienestar de los estudiantes, la asunción de riesgos y el aprendizaje de los errores. Un estudio longitudinal de Kjærgaard et al. (2024) demostró que un enfoque de aprendizaje sin calificaciones no sólo mantenía el rendimiento académico a lo largo del tiempo sino que también fomentaba una mayor motivación intrínseca y extrínseca, al tiempo que desalentaba las estrategias superficiales de aprendizaje de memoria.
También es crucial la retroalimentación inmediata y la consolidación del aprendizaje a largo plazo, temáticas sobre las que profundizaremos a continuación.
Retroalimentación inmediata
La retroalimentación (feedback) es una práctica esencial para apoyar el proceso de construcción de conocimiento, y debe ajustarse lo mejor posible a las necesidades de los estudiantes para maximizar su impacto (Coll et al. 2014). En particular, las investigaciones sobre retroalimentación inmediata han demostrado consistentemente que esta impacta positivamente el aprendizaje y la retención. Epstein y cols. (2002) demostró que los estudiantes que recibían retroalimentación inmediata durante las pruebas podían corregir errores y mejorar su desempeño en evaluaciones posteriores, incluso después de retrasos significativos. Escuela y Anderson (2008) descubrió que aquellos que recibieron retroalimentación inmediata completaron el material de capacitación un 40% más rápido que aquellos que recibieron retroalimentación tardía. Estuardo (2004) respalda aún más esto, demostrando que la retroalimentación inmediata mejora la precisión del juicio en las tareas de revisión analítica. AlShahrani et al. (2017) También reveló que la retroalimentación en tiempo real mejora la participación de los estudiantes y la comprensión conceptual en el aula.
Estos beneficios se extienden más allá de las ganancias inmediatas de rendimiento. La retroalimentación inmediata fomenta un aprendizaje más profundo y duradero al abordar conceptos erróneos en tiempo real y promover la participación activa. También aumenta la motivación y la confianza de los estudiantes, creando un ciclo de aprendizaje positivo. La efectividad de la retroalimentación inmediata resalta su importancia en diversos entornos educativos, desde plataformas de gamificación como Duolingo hasta materiales Montessori autocorregibles (materiales que permiten al estudiante autoevaluarse y autocorregirse). Al proporcionar información oportuna y específica, la retroalimentación inmediata permite a los estudiantes adaptar estrategias de aprendizaje, solidificar conocimientos y lograr un mayor éxito académico a largo plazo.
Desde una perspectiva neuronal, la eficacia de la retroalimentación inmediata surge de su influencia directa sobre el sistema de recompensa del cerebro y los mecanismos de procesamiento de errores. El cuerpo estriado, un componente clave del sistema de recompensa, es particularmente sensible a la retroalimentación inmediata y muestra una mayor actividad para obtener resultados positivos. (Foerde y Shohamy, 2011). Es importante señalar que este mecanismo de aprendizaje, impulsado por la retroalimentación inmediata y el cuerpo estriado, difiere del mecanismo de retroalimentación retardada asociado con el hipocampo. (Foerde y Shohamy, 2011). La activación estriatal probablemente esté mediada por la liberación de dopamina, lo que refuerza las acciones exitosas y promueve su repetición. Por el contrario, la corteza cingulada anterior (ACC) es vital para la detección y el procesamiento de errores. La retroalimentación inmediata, especialmente negativa, desencadena una respuesta ACC conocida como negatividad relacionada con errores (ERN), que indica un resultado inesperado. (Holroyd y Coles, 2002; Nieuwenhuis et al., 2004). Este rápido circuito de retroalimentación permite ajustes inmediatos en las estrategias de aprendizaje y el comportamiento, facilitando la corrección de errores y la adquisición de conocimientos. La inmediatez de la retroalimentación es crucial, según Opitz et al. (2011), fortaleciendo la asociación acción-consecuencia en el cerebro, lo que conduce a un aprendizaje más eficiente y efectivo.
Aprendizaje espaciado
La retroalimentación inmediata es sin duda beneficiosa para el aprendizaje, pero es crucial considerar también los mecanismos que permiten la consolidación a largo plazo de este aprendizaje en el hipocampo. Las técnicas de aprendizaje espaciado y entrelazado juegan un papel crucial en este proceso.
Según Carey (2014) nada en el aprendizaje de las ciencias se acerca al aprendizaje espaciado en términos de mejoras inmediatas, significativas y confiables para el aprendizaje. El aprendizaje espaciado ofrece dos beneficios principales: requiere la recuperación de información de la memoria a largo plazo y los intervalos entre sesiones de aprendizaje permiten una mejor organización y conexión de nuevos conocimientos con conocimientos previos. La técnica complementaria de entrelazado (mezclar el tema y la tarea que se estudia con otras cosas) fomenta la variedad y sugiere que practicar diferentes conocimientos o habilidades juntos es beneficioso. (Qadir e Imran, 2018).
Desde una perspectiva neurocientífica, el aprendizaje espaciado y el entrelazado promueven una consolidación de la memoria más sólida que otros métodos. La repetición espaciada de información desencadena procesos moleculares clave, como la síntesis de proteínas y la expresión genética, que estabilizan las conexiones sinápticas y fortalecen los rastros de la memoria a largo plazo. (Smolen et al., 2016). Además, el esfuerzo cognitivo involucrado en la recuperación activa de información durante sesiones de aprendizaje espaciadas puede estimular la formación de nuevas neuronas en el hipocampo, un área crítica para el aprendizaje y la memoria. (Sisti et al., 2007). Investigación por San Martin et al. (2017) sugiere que el efecto de espaciado sobre la memoria puede deberse a su influencia sobre la plasticidad sináptica. El efecto de espaciado permite cambios plásticos más específicos y precisos en las sinapsis, mejorando la capacidad del cerebro para codificar y almacenar información de manera eficiente.
La evidencia electrofisiológica sugiere además que el aprendizaje espaciado mejora la memoria a largo plazo al aumentar la similitud de los patrones neuronales entre las repeticiones. Esto podría lograrse reduciendo la fuerza de la recuperación momentánea, ya que los intervalos de repetición prolongados pueden ayudar a eliminar la representación residual en la memoria de trabajo. (Feng et al., 2019). Los beneficios del aprendizaje espaciado se extienden más allá de la memorización de memoria: Kapler y cols. (2015) demostró su eficacia para mejorar el aprendizaje tanto fáctico como de nivel superior en un aula simulada de pregrado. Además, Kang et al. (2014) descubrió que ampliar la práctica de recuperación, donde las sesiones de revisión se espacian progresivamente, conduce a una retención superior a largo plazo y a una mejor accesibilidad a la información durante el período de aprendizaje.
Cambiar el enfoque de las pruebas tradicionales al aprendizaje basado en proyectos, juegos o el método Montessori promueve aún más el aprendizaje espaciado. Estos enfoques fomentan la revisión repetida y el recuerdo de información relevante a lo largo del tiempo. En el método Montessori, por ejemplo, los niños tienen la oportunidad de utilizar repetidamente materiales como el cubo binomial en diferentes momentos. Podrían explorarlo primero sensorialmente en el preescolar y luego volver a visitarlo años más tarde en la escuela primaria para aprender la fórmula del cubo binomial, conectando la experiencia concreta con el concepto abstracto.
En esencia, el aprendizaje espaciado y el entrelazado, junto con la retroalimentación inmediata, crean una poderosa sinergia que optimiza el proceso de aprendizaje. La retroalimentación inmediata ayuda a corregir errores y reforzar la comprensión en el momento, mientras que la recuperación espaciada y el entrelazado facilitan la transferencia de este conocimiento a la memoria a largo plazo mediante el fortalecimiento de las conexiones sinápticas, la promoción de la neurogénesis y el refinamiento de las representaciones neuronales. Este enfoque multifacético se alinea con los mecanismos naturales de aprendizaje del cerebro, lo que conduce a resultados de aprendizaje más eficientes, efectivos y duraderos.
Satisfacción
Si bien no existen índices públicos disponibles sobre la satisfacción de los estudiantes en las escuelas Montessori, podemos aproximarnos a los niveles de satisfacción considerando la estadística de que el 93% de los estudiantes se sienten felices al estar inmersos en la naturaleza. (Informe Enraizando 2023-2024) y la alta tasa de satisfacción con plataformas de aprendizaje gamificadas como Duolingo, donde el 87,9% de los encuestados disfrutó o disfrutó mucho aprender en la plataforma, y solo al 3% no le gustó. (Vesselinov y Grego, 2012). Por el contrario, las encuestas entre niños de 5 a 17 años muestran que sólo el 67% disfruta habitualmente o mucho de ir a la escuela, mientras que el 13% rara vez lo disfruta y el 20% no le gusta activamente. (How Much Do Children like School – Survey Encuesta). Valores similares fueron identificados por Graham y cols. (2022), a un 66,5% le gusta la escuela y a un 33,5% no le gusta.
Estos porcentajes son significativos porque un mayor nivel de satisfacción se asocia con mejores resultados académicos. (Morris et al., 2021). Esto se alinea con el importante papel de las emociones en el aprendizaje, donde las emociones positivas y activas facilitan el aprendizaje en un estado de fluidez. (Huotilainen, 2024), lo que lleva a menos problemas de salud (Horanikova et al., 2022) y mayores niveles de felicidad (Gómez-Baya et al., 2021).
Los altos niveles de satisfacción reportados en las escuelas Montessori y las plataformas de aprendizaje gamificadas como Duolingo, en comparación con las escuelas tradicionales, sugieren que estos enfoques pueden estar aprovechando mecanismos neuronales clave que apoyan el aprendizaje y el bienestar. Las emociones positivas y el sentido de compromiso asociados con estos métodos probablemente activen elLos sistemas hedónico y eudaimónico del cerebro (Kringelbach y Berridge, 2010). La liberación de dopamina en esta vía no sólo mejora el disfrute del proceso de aprendizaje sino que también fortalece las conexiones neuronales asociadas con el material aprendido, promoviendo la retención y el recuerdo a largo plazo. (Kim et al., 2015; Puig y Miller, 2012; Wise, 2004).
Además, el enfoque en la motivación intrínseca y el aprendizaje autodirigido en la educación Montessori, que anima a los estudiantes a explorar temas que resuenan con sus intereses y valores y les da más tiempo para deambular libremente, puede facilitar la activación de la red del modo predeterminado ( DMN), una red cerebral asociada con la autorreflexión, la introspección y la integración de nueva información con el conocimiento existente. (Goldberg, 2022). Se cree que la DMN desempeña un papel crucial en la creación de significado y la construcción de relevancia personal, que son esenciales para un aprendizaje profundo y duradero.
El clima emocional positivo y la reducción del estrés asociados con las aulas Montessori también pueden contribuir a una función cerebral y un aprendizaje óptimos. Como Decano (2011) señala, la amígdala Es particularmente sensible a las emociones negativas como el miedo y la ansiedad. La ausencia de evaluaciones duras y presiones de desempeño en los entornos Montessori puede ayudar a regular la actividad de la amígdala, permitiendo una mayor concentración y participación en el proceso de aprendizaje. El énfasis en la colaboración y la interacción social en las aulas Montessori también puede Activar regiones del cerebro asociadas con la recompensa social y los vínculos, como la corteza prefrontal ventromedial, contribuyendo aún más a un ambiente de aprendizaje positivo y de apoyo. (Kringelbach y Berridge, 2010; Lockwood et al., 2024).
En esencia, la efectividad y los altos niveles de satisfacción observados en la educación Montessori y las plataformas de aprendizaje gamificada radican en su enfoque holístico que se alinea con la activación de mecanismos neuronales clave que apoyan el aprendizaje, la motivación y el bienestar. Al fomentar la motivación intrínseca, reducir el estrés, promover un sentido de autonomía y conexión social, promover la exploración activa, brindar retroalimentación inmediata y brindar oportunidades para el aprendizaje espaciado, estos enfoques crear un ambiente óptimo para que los niños se desarrollen no solo académicamente, sino también social, emocional y creativamente, preparando el escenario para el aprendizaje y el éxito durante toda la vida.
Conclusión: hacia una evaluación centrada en el aprendizaje
En conclusión, la evidencia sugiere que el sistema tradicional de pruebas y calificaciones tiene importantes limitaciones y consecuencias que pueden afectar negativamente el aprendizaje y el bienestar de los estudiantes. Por el contrario, los enfoques alternativos que reconocen el progreso individual, fomentan la motivación intrínseca y brindan retroalimentación constructiva pueden crear un entorno de aprendizaje más positivo, motivador y eficaz.
Implementar un cambio de paradigma en la evaluación del aprendizaje requiere un enfoque integral que involucre a educadores, padres y estudiantes. Al adoptar prácticas de evaluación que fomentan una mentalidad de crecimiento, la motivación intrínseca y el aprendizaje profundo, los educadores pueden capacitar a los estudiantes para que alcancen su máximo potencial y desarrollen un amor por el aprendizaje para toda la vida. La educación del futuro debe ir más allá de simplemente medir el desempeño y centrarse en cultivar la curiosidad, la creatividad y el pensamiento crítico, preparando a los estudiantes para los desafíos y oportunidades que nos plantea el avance tecnológico en inteligencia artificial, computación cuántica, energía verde, blockchain y otras tecnologías que están cambiando el entorno en que vivimos.
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